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En estos momentos con el contexto del Covid 19, vivimos en un entorno de crispación social (y algo más que crispación, por desgracia, en Estados Unidos). La escucha activa se hace más necesaria que nunca.
Escuchar, argumenta Erich Fromm, es “es un arte como la comprensión de la poesía” y, como cualquier arte, tiene sus propias reglas y normas. A partir de su práctica de medio siglo como terapeuta, Fromm ofrece seis pautas para dominar el arte de la comprensión desinteresada:
- La regla básica para practicar este arte es la concentración completa del oyente.
- No debe tener en mente nada importante, debe estar óptimamente libre de ansiedad y de avaricia.
- Debe poseer una imaginación que funcione libremente y que sea lo suficientemente concreta como para expresarse en palabras.
- Debe estar dotado de una capacidad de empatía con otra persona y lo suficientemente fuerte como para sentir la experiencia del otro como si fuera la suya.
- La condición para tal empatía es una faceta crucial de la capacidad de amar. Comprender a otro significa amarlo, no en el sentido erótico, sino en el sentido de llegar a él y superar el miedo a perderse.
- Comprender y amar son inseparables. Si están separados, es un proceso cerebral y la puerta a la comprensión esencial permanece cerrada.
La escucha activa es un “arte” que (a) requiere “disponibilidad, interés por la persona, comprensión del mensaje, espíritu crítico y prudencia en los consejos”, (b) consiste en una forma de comunicación que demuestra al hablante que el oyente le ha entendido. Escuchar activamente no se limita a dejar hablar al interlocutor sin interrumpir su discurso, sino que necesita de una atención física, psicológica y verbal que, por suerte, todos podemos mejorar. La escucha activa se refiere, como su nombre indica, a (1) escuchar activamente y con conciencia plena. No es oír a la otra persona, sino a (2) estar totalmente concentrados en el mensaje que el otro individuo intenta comunicar. (3) Es una técnica y estrategia específica de la comunicación humana, es utilizada en campos como la enfermería, la psicoterapia y la resolución de conflictos. (4) Implica asimismo, ofrecer disponibilidad y mostrar interés por la persona que habla. Se refiere a (5) la habilidad de escuchar no sólo (a) lo que la persona está expresando directamente, sino también los (b) sentimientos, ideas o pensamientos que subyacen a lo que se está diciendo. (6) Consiste en una forma de comunicación que demuestra al hablante que el oyente le ha entendido.
Las barreras para la escucha activa tienen un gran impacto negativo en la moral y la productividad de la colaboración y del trabajo en equipo. Esta situación generalmente resulta en conflictos y malentendidos entre los miembros del equipo, y crea un ambiente negativo. Afortunadamente, las habilidades de escucha se pueden aprender. 1.Hablar excesivamente, 2.Prejuzgar, 3.Distracciones, 4.Esperar o dar por supuesto que otros comparten nuestras creencias y valores personales, 5.Malentendido, 6.Interrumpir o interrupciones, 7.Hacer que escuchamos: Falsificando la atencion, 8.Dejarse llevar por las emociones, 9.El Ruido, 10.El miedo o el temor
La comunicación es un proceso de interacción en el que se produce un intercambio de sentimientos, información, ideas, emociones, conocimiento y todo lo que conlleva la trasmisión de un mensaje que necesita ser retroalimentado. La mayor dificultad de la comunicación es pensar que es fácil. Comprender los procesos de comunicación implica ser mucho más minucioso y elaborado que solo articular los mensajes. La comunicación eficaz es aquella que establece una conexión de doble vía, la cual siempre tendrá una conducta de reciprocidad y respeto para con los demás.
La asertividad y la escucha activa no son conceptos contrapuestos. Debemos ser asertivos mientras practicamos la escucha activa y, por otra parte, una asertividad basada en la escucha activa suele ser más eficaz. Cuando nos encontremos ante afirmaciones, ataques o peticiones que no podamos hacer frente, debemos comunicárlo claramente, honestamente y con el máximo respeto.